jueves, 1 de mayo de 2014

Estambul

VIAJE A TURQUÍA: ESTAMBUL, PAMUKKALE, ÉFESO Y CAPADOCIA (2013)


ESTAMBUL  
  
Con una ubicación privilegiada, en el estrecho del Bósforo y a caballo entre Europa y Asia, Estambul se considera una de las grandes ciudades más bellas del mundo:
Extensa pero muy fácilmente transitable para el turista, gracias a su ágil transporte urbano, la visita a Estambul requiere  por lo menos de cuatro días para disfrutar  no solo de sus numerosos monumentos,  sino además  de sus plazas, calles y rincones.  


VISITAS INELUDIBLES

BASILICA DE SANTA SOFÍA


Santa Sofía es indudablemente uno de los símbolos de la ciudad de Estambul: La primera construcción fue erigida con el emperador Constantino, patriarca del cristianismo en oriente.  Sufrió varias reconstrucciones y reformas, pero sería el emperador Justiniano el que le daría su máximo esplendor, pretendiendo con ello engrandecer no solo el templo sino la ciudad entera.
Basílica ortodoxa durante casi toda su historia, posteriormente mezquita e incluso iglesia católica durante unos pocos años,  Santa Sofía está hoy día "retirada" del culto y ha pasado a formar parte de los museos de la ciudad de Estambul.
Se considera una auténtica "perfección" en sentido arquitectónico debido a sus proporciones, especialmente al soporte de su cúpula que da sensación de estar "suspendida en el aire". Su interior es de gran belleza, por sus dimensiones, su decoración, sus grandes lámparas colgantes y sus hermosos mosaicos bizantinos entre los que se conservan varios de la virgen con el niño, de los emperadores Justiniano y Constantino, ofreciendo a la virgen la Iglesia y la ciudad de Constantinopla y especialmente el famoso Cristo Pantocrator.



LA MEZQUITA AZUL
Situada en frente de Santa Sofía, la Mezquita azul es la única del mundo con 6 minaretes, y con toda seguridad la mezquita más conocida de Estambul. Su interior decorado muy delicadamente con azulejos azules, le da su sobrenombre (su verdadero nombre es Mezquita de Sultán Hamet), por el cual es más conocida.
Muy recomendable acercarse por la noche a la zona de las dos (Mezquita Azul y Sta. Sofía) y observar el espectáculo de luces que se presenta en la fuente ubicada entre ambas.




PALACIO TOPKAPI



La residencia del Sultán, es un complejo de jardines y pabellones visitables, entre los que destaca el Harén (visita con entrada aparte). Es aconsejable hacer la visita un día soleado, no solo por lo agradable de sus jardines y  por las hermosas vistas al Bósforo que se contemplan desde sus terrazas, sino también por disfrutar de la visita al harén con una iluminación que permita apreciar su exquisita decoración con azulejos así como sus techos estucados
Una de las salas más interesantes del  TOPKAPI es la del tesoro, donde se pueden admirar todas las riquezas de los sultanes, recibidas desde diversas partes del mundo:  joyas, (entre ellas el "Gran Diamante" que con sus 88 quilates es uno de los mayores del mundo), vajillas, y armas, entre las que se encuentra el puñal más caro del mundo, una daga engastada con diamantes y esmeraldas que es casi más una joya que un simple arma. Completan las colecciones elaborados trajes,  varios tronos del sultán, e incluso una incomparable colección de relojes de pared de lo más variopinto, con sus mecanismos a la vista , algunos tan trabajados y con tal ingenio que merecen de por sí esta visita.




MUY RECOMENDABLE
Una visita que normalmente no ofrecen los guías turísticos y que creo que resulta imprescindible, es la del Museo Arqueológico, dentro del recinto del Topkapi, pero con entrada aparte: Compuesto en realidad por tres museos : El del Antiguo  Oriente, el de Azulejos y el propio Arqueológico, que atesoran una gran cantidad de obras, de Egipto,  Mesopotamia y la Antigua Babilonia, Roma o Grecia.  Muy destacables los mosaicos bien conservados de las Puertas de Isthar (entrada a la antigua Babilonia) además  de una interesantísima  colección de sarcófagos, algunos encontrados en la necrópolis real de Sidón (actual Líbano),  que formaba parte del imperio Otomano, trabajados en piedra con muy variadas formas.  Es aquí donde se encuentra la joya más célebre del museo, el Sarcófago de Alejandro: Trabajado en piedra, antiguamente estucado (aunque hoy se conserva apenas sin color alguno) recoge escenas de batalla labradas con tal delicadeza que aunque hoy día ya se ha puesto en duda que realmente se trate del sepulcro de Alejandro Magno se sigue considerando un auténtico tesoro que merece ya por sí solo la entrada al museo.
Muy próximo a la Mezquita Azul  también encontraremos, o más bien intuiremos, los restos del Hipódromo que nos dejó como huella el Antiguo Imperio Romano: prácticamente no queda nada que nos permita identificarlo pero aún merece la pena darse un paseo por la plaza que se ubica hoy en su lugar, en la que se encuentran el Obelisco de Teodosio, la Columna Serpentina y la Columna de bronce.



Si continuamos paseando por la antigua Estambul y tenemos varios días en la ciudad no debemos obviar un interesante lugar que normalmente los guías turísticos no ofrecen: la Cisterna de la Basílica. Esta cisterna subterránea que surtía de agua a la ciudad y gran parte de alrededores, resulta una visita original y muy interesante: con una iluminación tenue muy sugerente, se recorre una pasarela rodeada de cientos de columnas sobre el agua, hasta llegar a la columna de la "Medusa" decorada con la enorme cabeza en piedra de este ser de la mitología griega. El espacio es tan atrayente que se viene utilizando incluso para dar conciertos de música clásica




Una vez finalizadas las visitas culturales, podemos cambiar de tercio perdiéndonos en el mundo árabe de los zocos y mercadillos recorriendo uno de los bazares más famosos del mundo. El Gran Bazar es un laberinto de calles a techo cubierto, repleto de objetos variados y clasificados por género: cerámica, cuero, joyas, antigüedades... donde podemos permitirnos alguno o muchos caprichos, según la calidad que se requiera, aunque si no se tiene buen ojo es difícil diferenciar lo fabricado "en serie", de lo que realmente está hecho a mano, y las antigüedades que los vendedores ofrecen, de las más que abundantes falsificaciones. De cualquier manera se compre o no, la visita es de lo más recomendable aunque solo sea por callejear bajo sus fantásticos techos decorados, o tomar un té en uno de sus acogedores y típicos rincones.





Y si de bazares hablamos tampoco debemos perdernos el de las Especias o Bazar Egipcio, muy cercano al Puente de Gálata, que resulta también de gran interés al tratarse de un típico bazar oriental, con sus puestos repletos de colorido y aromas, con un ambiente quizás más puro y algo menos turístico.





Pero Estambul no acaba en el barrio de Sultanahmet. La zona europea de Beyoglu en el lado sur del famoso Cuerno de Oro resulta muy interesante a pesar de ser la más moderna de la ciudad.
El Puente Gálata merece la pena recorrerlo a pie para contemplar desde allí la incomparable puesta de sol, además de ser testigos del curioso espectáculo de la pesca ya que la cantidad de pescadores que inunda el ambiente  con sus cañas, cestas y aperos es más que sorprendente. También se puede recorrer la parte inferior del puente donde un buen número de restaurantes ofrecen pescado y otros menús con vistas al Cuerno de Oro. A ambas orillas del puente podemos observar la cantidad de puestecillos que venden pescado a la parrilla recién hecho e incluso los barcos-restaurante que actúan como auténticos quioscos flotantes y que por la noche adquieren, con sus luces reflejándose en el Bósforo, un encanto muy especial.



La torre Gálata con su mirador, la calle Istiklal Caddesi con el tranvía antiguo circulando en medio de la subida plagada de comercios y hermosos edificios o incluso la moderna Plaza Taksim justifican de sobra el recorrido a pie por la ciudad.


En definitiva, del viaje a Estambul uno se trae la sensación no solo de haber visitado una de las ciudades más bellas del mundo, sino de haber recorrido una ciudad cómoda y fácil de transitar a pesar de sus dimensiones, pero sobre todo amable, un placer y un lujo para todos los sentidos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario